miércoles, 10 de junio de 2015

EVOLUCIÓN DE LOS VALORES HUMANOS

 Los valores ocupan el lugar más importante en la vida de los seres humanos.  En realidad no hay actividad en nuestras vidas que no sea iniciada a partir del sentido de valor o de disvalor.  Nuestras reacciones ante cualquier situación están basadas en nuestras necesidades, intereses, gustos, aversiones, actitudes y prejuicios queformulamos y desarrollamos durante el curso de nuestro crecimiento y desenvolvimiento.   Esto significa que el conocimiento de un objeto, una situación o un hecho es anterior a la idea de valor.   Es sólo después de conocer un objeto que lo valoramos o desvaloramos.  El juicio de valor se manifiesta como deseo de aproximarnos al objeto o evitarlo.   En otras palabras, deseamos realizar lo que valoramos y deseamos evitar lo que desvaloramos.

Un aspecto de los valores humanos es que son organizados de manera jerárquica.  Los factores principales que contribuyen a que el ser humano se haga conciente de valores superiores e inferiores van en dos vertientes.   En primer término, el ser humano tiene la capacidad de introspección.  Esto quiere decir que él puede ser su propio testigo o juez; estanto el objeto como el sujeto; es conscientede sí mismo y puede conocerse a sí mismo; es el conocedor y lo conocido; es su propio espectador.   En segundo término, el ser humano es conciente de su ideal, de su ser superior y de su ser inferior; sabe que tiene impulsos e instintos animales básicos así como una naturaleza espiritual superior.  Por ello, es su propio juez.  Se critica a sí mismo por sus imperfecciones y pone delante de él un ideal a ser cumplido; un ideal que no es menor que la auto perfección. 

Siempre existe una brecha entre lo que quiere ser y lo que realmente es.  Desea reducir esa brecha; pero su capacidad para aplicar su voluntad a través de su autodeterminación no es igual a su capacidad para la introspección. Mientras su superego lo atrae en la dirección del cielo, el id lo jala en la dirección opuesta; los instintos animales lo atraen hacia su ser inferior mientras que la influencia espiritual lo proyecta hacia su ser superior.   Todo es una batalla entre el ser empírico (sensorial) y el ser espiritual; un conflicto entre tendencias egoístas y tendencias altruistas.   El resultado es que, debido al continuo conflicto entre el ser inferior y el ser superior, el ser humano conciente permanece en un estado de tensión.  Esta tensión sólo se resuelve con la obtención del valor respectivo.

Lo que llamamos valores inferiores se refieren a las necesidades animales básicas del ser humano tales como el instinto de conservación, hambre, sueño, seguridad y sexo.   Además, también es un ser social.  Por ello, sus necesidades de pertenencia social y amistad son también naturales.   Todas estas necesidades fisiológicas, psicológicas y sociales son egocéntricas.  Se mueven dentro de la esfera del “estar”.

En contraste con éstos, el ser humano tiene otra serie de valores que surgen de su búsqueda de perfección.   Si queremos conocer la concepción del ser humano de su ideal, tenemos que indagar acerca de las causas de su insatisfacción, que lo están obligando a dejar la esfera del “estar” y lo están empujando a ir más arriba.   La respuesta debe encontrarse dentro de sus propias imperfecciones y su incompleta satisfacción de deseos que surgen de su estado presente.   Para ello, debemos analizar los valores que son resultado de sus deseos como ente natural. Estos son, como ya se mencionó, (1) valores de sobrevivencia y (2) valores psicológicos.   En términos más concretos, estos son los deseos de (1) riqueza, (2) placer, y (3) auto-conservación.   Pero ya que la riqueza material es instrumental para los otros dos valores, sólo tomaremos en cuenta el placer y la auto-conservación.

Consideremos en primer término el placer.   Es parte de la naturaleza humana la búsqueda de placer o felicidad.   El placer que puede obtener de su situación de “estar” es fugitivo y efímero.   Además, su experiencia empírica le muestra que este placer o felicidad fugitivo siempre es seguido por su contraparte, esdecir, sufrimiento y pena.  Así que, aquíencontramos la primera causa de su insatisfacción con su presente estado de existencia.  Para alcanzar, aunque sea, unestado temporal de placer o felicidad, debeestar preparado para enfrentar después dolor, sufrimiento y aflicción.   Por lo tanto, partiendo de este estado alternante y relativo de placer y dolor, el ser humano aspira a elevarse a un estado permanente de Dicha Absoluta.  Así, lógicamente, un estado de Dicha Absoluta sería la primera concepción del estado ideal que quisiera alcanzar.

Tan sólo de este valor inferior de placer y felicidad, el ser humano también se hace conciente de otro valor superior a saber, labondad moral.   A lo largo de su vida cotidiana, el ser humano se percata de que la miseria y el sufrimiento de otros le afecta adversamente.  Se altera y pierde su paz mental, si encuentra a su alrededor criaturas que estén sufriendo o en un estado miserable.   Su experiencia le muestra, además, que si ayuda a otros aportándoles alivio a su dolor y sufrimiento sacrificando sus propias comodidades, recibe una clase peculiar de satisfacción, que no experimenta a través de la gratificación de placeres inferiores y sensuales.   También se hace conciente del hecho de que si no ayuda a los pobres y a los indefensos, que necesitan de su auxilio, sesiente infeliz y su corazón siente una clase peculiar de carga que le produce insatisfacción.   Así llega a la comprensión de que la felicidad y bienestar proporcionado a otros le devuelve a cambio una satisfacción más profunda, que es más duradera y reconfortante que el placer obtenido a través de la indulgencia sensual.   Debido a estas experiencias,  el ser humano llega a la creencia y desarrolla la convicción intelectual  que, de una u otra manera,  los aparentemente distintos seres empíricos se encuentran intrínsecamente relacionados a través de una invisible conciencia cósmica,  tal como las en apariencia diferentes olas en la playa forman parte del mismo mar.   Esta visión le lleva al sentimiento de unidad con toda la creación y, debido a ello, sustendencias egoístas empiezan a desvanecerse y abren el espacio a tendencias más altruistas.   Es entonces que la buena voluntad y la bondad moral brotan del ser humano.   Debido a la profunda satisfacción gozosa que deriva del servicio altruista a otros seres, elser humano llega a la valoración de la bondad moral como un valor superior.   Así, laconcepción del ser humano de su ideal de auto-perfección incluye el servicio altruista y la bondad moral. 

Tomemos ahora en consideración el segundo valor básico, es decir, la auto-conservación.   La causa de insatisfacción del ser humano a este respecto radica en la existencia temporal de su cuerpo físico.   Ya que el ser humano se identifica con su cuerpo físico como si fuera él mismo, el cual deja de existir con la muerte, se mantiene en un estado de miedo y ansiedad a lo largo de su existencia.   Por un lado, el deseo de auto conservación e inmortalidad y, por el otro, la desnuda verdad de la muerte del cuerpo físico se convierten en un gran predicamento y dicotomía para el ser humano, creándole un estado de ansiedad y de tensión al no poder encontrar una solución a este conflicto.  Ni puede reconciliarse con la idea de la cesación de su existencia ni puede hacerse inmortal.   Como la idea de la muerte horroriza al ser humano, emerge en él un deseo de auto-perfección que implica la inmortalidad o la existencia eterna.

Para encontrar un soporte a la verosimilitud de la existencia eterna, desarrolla la noción de realidad primordial o suprema, la cual trasciende tiempo y espacio, y subyace, sostiene y mantiene a todo lo existente.   Especula que esta realidad o verdad primordial es inmanente a todos los seres empíricos.   En otras palabras, filosóficamente, el ser humano puede alegar que en realidad él es eterno ya que, en esencia, no existe diferencia entre su ser real y la realidad primordial. Así, vemos que la concepción humana del `ser´ en su perfección, es de la naturaleza de la verdad eterna y de la realidad primordial.

Todos los sistemas indios creen que el ideal de la perfección humana es alcanzable.   Sin embargo, mero conocimiento filosófico de la verdad, siendo mediato ya que está basado en una construcción teorética, no puede considerarse final.  A menos que la Verdad o la naturaleza de la Realidad Primordial seantambién realizadas a través de la experiencia inmediata, nuestro conocimiento filosófico mediato es de poca ayuda para producir en nosotros un cambio de conducta.   Para poder convertir nuestro conocimiento intelectual mediato en una experiencia inmediata tenemos que seguir el curso práctico de una disciplina espiritual, como el Yoga.  Esta disciplina demandará del aspirante, en primer término, el cultivo de un espíritu de desapego a través de la eliminación de los impulsos egoístas del ser inferior y, en segundo término, la contemplación de la Verdad, mientras se lleva una vida de servicio altruista y de bondad moral sin egoísmo.   Un curso de disciplina práctica como el mencionado sólo será fructífero si es iniciado y vivido bajo la guía de un maestro o Guru,  figura que no necesariamente se refiere a una persona en particular sino a las enseñanzas encarnadas en alguna tradición espiritual.