viernes, 6 de febrero de 2015

El Primer Acuerdo.

EL 1er. ACUERDO: “Sé impecable con tus palabras” Extracto del Libro: EL QUINTO ACUERDO de Miguel y José Ruiz
Los seres humanos nacemos con el poder de la creación, así que constantemente estamos creando historias con las palabras que hemos aprendido. Todos nosotros utilizamos la palabra para formar nuestras opiniones, para expresar nuestro punto de vista. A nuestro alrededor suceden innumerables acontecimientos y, utilizando la atención, tenemos la capacidad de reunir todos esos acontecimientos en una historia. Creamos la historia de nuestra propia vida, la historia de nuestra familia, la historia de nuestra comunidad, la historia de nuestro país, la historia de la humanidad, la historia del mundo entero. Cada uno de nosotros tiene una historia que compartimos, un mensaje que nos entregamos a nosotros mismos y que transmitimos a todo y a todas las personas que nos rodean.
Fuiste programado para entregar un mensaje y la creación de ese mensaje es tu mayor arte. ¿Cuál es el mensaje? Tu vida. Con ese mensaje creas principalmente tu historia, y después, la historia sobre todo lo que percibes. Creas una realidad virtual entera en tu mente y vives en esa realidad. Cuando piensas, lo haces en tu lengua; repites en tu cabeza todos los símbolos que significan algo para ti. Te estás brindando a ti mismo un mensaje, y ese mensaje es la verdad para ti porque crees que es la verdad.
La palabra, como símbolo, tiene la magia y el poder de la creación, porque puede reproducir una imagen, una idea, un sentimiento o una historia entera en tu imaginación. Sólo con oír la palabra caballo se puede reproducir una imagen completa en tu mente. Ése es el poder de un símbolo, pero todavía puede ser mucho más poderoso que eso. Quizá puedas entender lo que nos dice la Biblia: «En el principio existía el Verbo, y el Verbo estaba con Dios, y el Verbo era Dios».En el mismo principio, Dios creó la palabra y la palabra es un mensajero. Por consiguiente, si Dios creó la palabra para entregar un mensaje y si la palabra es un mensajero, entonces eso es lo que eres: un mensajero, un ángel.
Te estás contando una historia, pero ¿es la verdad? Si utilizas la palabra para crear una historia en la que te juzgas y te rechazas a ti mismo, entonces estás utilizando la palabra en tu contra y no estás siendo impecable. Si utilizas la palabra para crear un conflicto en el cual tu cuerpo podría resultar dañado, evidentemente la utilizas en tu contra.
Sé impecable con tus palabras significa realmente no utilizar nunca el poder de las palabras contra ti mismo. Cuando eres impecable con las palabras, nunca te traicionas a ti mismo. Nunca utilizas las palabras para chismorrear sobre ti mismo, ni para esparcir veneno emocional contando chismes sobre otras personas.

Recuerda: eres el creador de la historia de tu propia vida. Si utilizas la palabra de manera impecable, sólo imagínate la historia que vas a crearte para ti mismo. Utilizarás la palabra en la dirección de la verdad y del amor por ti mismo. Utilizarás la palabra para expresar la verdad en cada pensamiento, en cada acción, en cada palabra que utilices para describirte a ti mismo y para describir la propia historia de tu vida. ¿Y cuál será el resultado? Una vida extraordinariamente bella. En otras palabras, serás feliz.
Como puedes ver, la impecabilidad de las palabras tiene un influjo mucho mayor de lo que parece. La palabra es magia pura, y cuando adoptas el primer acuerdo, la magia sencillamente acontece en tu vida.